El jefe de Gobierno porteño admitió su frustración tras los resultados electorales en la Ciudad. Aseguró que la campaña se centró en temas nacionales y reconoció la dificultad que enfrentará con una Legislatura sin mayoría. Aun así, confía en el futuro del PRO.

Tras conocerse los resultados de los comicios en la Ciudad, Jorge Macri expresó su decepción por el desempeño del PRO y explicó que la elección terminó girando en torno a la política nacional. “La elección se nacionalizó y no logramos poner en el centro los temas locales”, señaló.

El jefe de Gobierno también apuntó contra la división interna del espacio y admitió que eso complicó aún más el escenario. “No ayudó la extrema fragmentación. La gente quiso apoyar el rumbo del presidente Milei y eso desvió el foco”, dijo.

A pesar del revés, Macri destacó que el PRO creció en número de bancas en la Legislatura porteña, pasando de 7 a 11. Sin embargo, deberá gobernar con una minoría y apelar al consenso: “La ciudadanía pide una Legislatura más plural. Habrá que dialogar más”, reconoció.

Lejos de hablar de un cierre de ciclo, el alcalde aseguró que el PRO sigue con proyección política y que cumplirá su mandato. “Por supuesto que tenemos futuro. Yo soy jefe de Gobierno por dos años y medio más, y voy a seguir gobernando”, afirmó desde el búnker partidario.

También destacó su experiencia en momentos difíciles: “No estoy contento, pero estoy acostumbrado a administrar situaciones complejas”, concluyó.