Una carta escrita por Laura Leguizamón fue hallada en su vivienda y se convirtió en una prueba central en la investigación por el caso de Villa Crespo. El manuscrito contiene frases enigmáticas y posibles pistas vinculadas a teléfonos celulares.
Una carta manuscrita hallada en la cocina del departamento de Laura Leguizamón se convirtió en una pieza clave en la causa judicial que investiga el caso de Villa Crespo. El documento, redactado de forma irregular y con signos de apuro o confusión, fue encontrado por los investigadores en medio de la escena.
Entre los mensajes escritos se destacan frases como “Fue mucho. Los amo. Lo siento”, junto con expresiones ambiguas como “Íbamos a la calle” y “Todo mal, muy perverso”. El contenido fue escrito con trazos desordenados y combinaciones de cursiva e imprenta, lo que sugiere un fuerte estado de alteración emocional.
Un detalle llamativo en la parte inferior de la hoja es una posible referencia a un patrón de desbloqueo de celular: “Mi tel es ‘L’”. Los peritos también analizan otras anotaciones que podrían estar relacionadas con datos de acceso a dispositivos móviles de la familia.
Tanto familiares como personas del entorno cercano confirmaron que Leguizamón atravesaba un tratamiento psiquiátrico. En el domicilio se encontraron envases de medicamentos que forman parte de tratamientos para trastornos del ánimo y otras condiciones de salud mental.
La Justicia ordenó peritajes caligráficos y el análisis de otros elementos personales como carpetas escolares y una lapicera, para verificar la autoría del escrito. El objetivo es reconstruir el contexto emocional y psicológico en el que se desarrollaron los hechos, que conmocionaron al barrio de Villa Crespo.






