Un informe oficial confirmó que al menos 33 personas fallecieron tras recibir fentanilo contaminado en hospitales de Buenos Aires, Santa Fe y la Ciudad de Buenos Aires. La ANMAT suspendió a los laboratorios involucrados y la Justicia investiga.

Al menos 33 personas murieron tras recibir fentanilo contaminado en hospitales y clínicas de la provincia de Buenos Aires, Santa Fe y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Así lo reveló un estudio de la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud «Dr. Carlos G. Malbrán», que vinculó las muertes con infecciones graves ocurridas en pacientes intubados o en terapia intensiva.

La alerta surgió a mediados de abril, cuando el Hospital Italiano de La Plata detectó irregularidades en ampollas del fármaco fabricado por el laboratorio HLB Pharma. El análisis posterior halló dos bacterias peligrosas y resistentes: Ralstonia pickettii y Klebsiella pneumoniae, lo que desató una investigación sanitaria y judicial.

Entre las víctimas se cuentan 15 en el Hospital Italiano de La Plata, nueve en el Sanatorio Parque de Rosario, seis en el Hospital Clemente Álvarez, y otras distribuidas en distintos centros de salud. Las autoridades sanitarias actuaron de inmediato, y la ANMAT ordenó retirar el fentanilo del mercado, además de suspender la actividad de HLB Pharma y su socio Laboratorio Ramallo.

Paralelamente, la Justicia federal, a cargo del juez Ernesto Kreplak, realizó allanamientos en tres lugares, incluida la droguería Nueva Era, sospechada de distribuir parte del lote contaminado. El juez también pidió a las provincias que informen si hubo casos similares desde el 1 de abril.

Una de las hipótesis que más peso ha cobrado es la de un posible sabotaje dentro del laboratorio HLB. La propia directiva denunció el ingreso no autorizado a la oficina de Garantía de Calidad, donde se habrían destruido documentos clave relacionados con la fabricación del fentanilo.