El estado de salud de la ex vicepresidenta mantiene la atención pública, mientras continúa internada y sometida a controles médicos por una apendicitis que presentó una evolución compleja. Los médicos optaron por la cautela y el monitoreo permanente.

El cuadro clínico obligó a prolongar la internación de Cristina Kirchner, ya que surgieron complicaciones que requieren seguimiento estrecho. Fuentes cercanas indicaron que la decisión busca garantizar una recuperación completa y evitar riesgos adicionales.

La apendicitis, una afección frecuente, puede derivar en situaciones más delicadas cuando aparecen infecciones o inflamaciones persistentes, motivo por el cual los profesionales suelen priorizar la observación hospitalaria. En este caso, la evolución es evaluada día a día.

En el plano político y social, la situación despertó múltiples reacciones y mensajes de apoyo. Se espera que en las próximas horas haya novedades oficiales sobre su evolución y sobre cuándo podría recibir el alta médica, siempre supeditada a una respuesta favorable al tratamiento.